Obra plástica del artista cubano, Carlos Estevez.
“Un cartel en la puerta nos anuncia
que está en venta lo que fuera el horcón
de sus vidas; desde el jardín la yerba
ha comenzado a invadir sus dominios”.
que está en venta lo que fuera el horcón
de sus vidas; desde el jardín la yerba
ha comenzado a invadir sus dominios”.
Jesús J. Barquet, en Vecindades
Vuelvo
como un pedazo de pan
A ponerme
cerca del anafe y a tu alcance
A
servirme sobre la mesa, a darme como si tuviera más vida.
A trazar
una línea delgada e imperceptible/ como un estambre
Que
tan sólo tú puedes romper con un ademán
Una desmemoria/otra
mirada acosada/cualquier insulsa profecía.
Hubiera
querido regresar mucho antes… más angelical
Encontrarte
en otra geografía con círculos de agua y peces
Llegar
hasta tu puerta, con las alas menos crecidas
Sin
que hubiera caído tanta ceniza volcánica sobre la parra del patio
ni tantas
migraciones de pájaros muertos sobre el cielo.
Me
hubiera gustado subir la loma
Con
el mismo paso firme de antaño, con semejante fe
Con la
indocilidad de aquella piel con blancura de grumete
Para atemperar
los sobresaltos y rencores que siempre te rondaron
Y
borrar de un empellón todos tus vetustos ritos y trampas.
Y así
sin previo aviso entrecruzo nuevamente el umbral
Ante
tu visión detenida – ahora - en los melanomas de mis manos
Y en la
pesadez de mi espalda que torpemente se inclina
Como
un ceibo en cuatro esquinas donde ya no se arrima ofrenda.
Y es
que vengo como quien debe cumplir un contrato familiar
Que
no fue escrito en testamento alguno, pero igual debe cumplirse
Igual
que el homicida que regresa a la escena
Para
comprobar que poco se puede hacer por un despojo.
Preguntas
mi nombre sin mirar otro lugar que no sean mis zapatos, como absorto y/o
mascullas una bendición que no alcanzo a descifrar,
(O viceversa).
Buenos
Aires, 22 de noviembre 2011
Con escaso viento
en el jardín.
No hay comentarios:
Publicar un comentario